Fondación Elsbeth Kasser

Karl Borg – Lascite ogni speranza!
Gurs, más que un lugar
Gurs es un pequeño pueblo del sur de Francia, al pie de los Pirineos. En la primavera de 1939, se construyó una enorme ciudad de barracones en un gran terreno baldío, en las inmediaciones de los refugiados españoles que habían cruzado los Pirineos al final de la Guerra Civil española. Gurs se convirtió en el mayor campo de internamiento de Francia. El campo existió durante casi siete años.
Más de 60.000 indeseables fueron internados allí temporalmente en varias oleadas: primero refugiados republicanos y combatientes voluntarios para España procedentes de más de cincuenta países, después mujeres indeseables y sospechosos políticos y, por último, entre 1940 y 1944, miles de judíos. 3907 de ellos fueron deportados de Gurs a Auschwitz y asesinados. En general, los internos no judíos sobrevivieron al campo. Otros huyeron a Portugal, luego a ultramar, y unos pocos a Suiza.
Gurs fue un lugar de horror, miseria y humillación. Se convirtió en el símbolo de los años más oscuros de la historia de nuestro continente en el siglo pasado. Tras una larga historia de esfuerzos franceses por borrar los recuerdos de Gurs, el lugar es ahora un monumento contra el olvido. Gracias a los esfuerzos de muchos alemanes, españoles y franceses, la historia de Gurs está ahora bien documentada. A ello han contribuido los testimonios de las víctimas que vivieron el horror y los de los voluntarios que lo presenciaron.
Elsbeth Kasser fue una de ellas. Su colección se ha convertido en un monumento contra el olvido. Además de un modesto memorial y un cementerio, el emplazamiento del antiguo campo alberga hoy un barracón y una lápida en recuerdo de su labor.